Sobre el cuidado de los reptiles como mascotas

Si estás pensando en mantener a una tortuga, una rana o serpiente, deberás estar al tanto de las medidas adecuadas para cuidar a un reptil. Los reptiles pueden ser mascotas ideales, pues son relativamente fáciles de mantener, no requieren limpiezas regulares, e incluso pueden dejar de alimentarse por días, de hecho, los reptiles no deben ser alimentados en una base regular, ya que tienden a ser obesos. En comparación con los mamíferos como mascotas, los reptiles son muy tranquilos y casi no emiten ningún olor corporal. Para manejar a un reptil como mascota seguro se requiere estar familiarizado con su naturaleza, características de comportamiento y necesidades específicas. Algunos reptiles, incluso no requieren un espacio mayor al de una maceta.

Los reptiles son animales de sangre fría, y no pueden regular su temperatura corporal, y en el medio silvestre hibernan o buscan la manera de mantenerse alejados de los cambios extremos de temperatura. Para el cuidado de una mascota reptil debe asegurarse de no manipular a su mascota con las manos secas y también no permitir que su mascota se enfríe demasiado.

Los siguientes son algunos consejos en el cuidado de reptiles, que podrían ayudarte a mantener a tu mascota sana y fuerte.

• La jaula para su mascota debe ser acuerdo a su tamaño y su hábitat natural, como por ejemplo una jaula larga y estrecha, con una rama de árbol en caso de tener un reptil arbóreo, como un camaleón. Requerirás una jaula baja pero amplia para una mascota acostumbrada a un hábitat terrestre, como una tortuga. En caso de un terrario acuático, la jaula puede ser un acuario, también pueden tener un recinto especial en forma de una pequeña piscina, donde el reptil pueda enfriarse si quiere mantenerse alejado de las fuentes de calor. Se deben hacer algunas consideraciones especiales con respecto al tamaño de la jaula si planeas tener un reptil de gran tamaño, como una pitón, que crecen a hasta los 20 pies de largo o las iguanas verdes de 6 pies. 
• Para el buen cuidado de su reptil, la morada debe ser a prueba de escape, calor, resistente a la humedad y estar bien iluminado. 
• Cada objeto que se coloque dentro de la jaula, como platos y decoraciones debe ser tratado con desinfectantes. En lugar de cloro use desinfectantes a base de fenol o cualquier limpiador de alcohol para propósitos de lavado y aclarado. 
• Los reptiles tienen diferentes hábitos alimenticios. Pueden ser herbívoros, carnívoros u omnívoros. Los animales como las iguanas y tortugas son verdaderos herbívoros. Por lo general, requieren pequeñas cantidades de comida, pero con variedad. Su dieta debe incluir proporciones adecuadas de minerales y nutrientes. Algunos alimentos comunes para los reptiles herbívoros son perejil, hojas diente de león, berros, lechuga, vegetales amarillos y frutas. Los tomates son muy preferidos por la tortuga. La espinaca no debe incluirse en su cuerpo, ya que se une al calcio. 
• Los reptiles carnívoros como las serpientes, ranas y pequeñas jicoteas viven de dietas ricas en proteínas. Algunos alimentos comunes son roedores, insectos y otros invertebrados. A una serpiente le gustaría comerse a una rana,  mientras que un lagarto grande preferiría una lagartija. Otros alimentos ricos en proteínas incluyen yuppies, peces oro, huevos y pequeños reptiles. 
• Los roedores como ratones, ratas y conejos y los pollos pueden alimentar a las serpientes y los lagartos , ya sea vivos o en forma congelada. Los insectos como grillos, gusanos, lombrices, moscas, pueden alimentar a las tortugas y ranas. 
• Antes de comprar un reptil como mascota, asegúrese de la categoría en qué cae. Algunos reptiles son manejables y semi-manejables, mientras otros, por su naturaleza mordaz son mantenidos únicamente con fines visuales.