El apareamiento de las palomas

Uno de los primeros problemas con los que se enfrenta un criador principiante de palomas está relacionado con el apareamiento y se trata de la identificación de los sexos. Esta es una habilidad que se logra con la práctica, a pesar de que muchos aficionados consagrados pueden cometer errores de vez en cuando.

En primer lugar, debe tenerse en cuenta que, como en la mayoría de las aves, en este caso no existen órganos sexuales visibles, y además a diferencia de otros tipos de aves, no hay desigualdad de colores entre los sexos. Las diferencias de color son el producto de la herencia, sin embargo, un colombófilo llega a conocer a su familia de aves individualmente, y por lo general, puede distinguir qué paloma es hembra y cuál es macho.

Existen algunas pistas que pueden ayudar en este sentido. Por ejemplo, el macho es generalmente más grande que la hembra y esto se nota desde el día de la eclosión. También, como regla general, el macho tiene la cresta más alta en su cabeza, por encima del nivel del ojo, mientras la cabeza de la hembra tiene una cresta menos pronunciada y por lo tanto, los ojos parecen estar ubicados más alto. El aspecto en conjunto de la hembra luce más dulce y atractivo, mientras que el macho tiene un aspecto más agresivo.

Otra pista es la acción preliminar de cortejo, cuando usted ve a un macho aparentemente soplando y dando vueltas en frente de la hembra, esto significa que quiere atraer su atención. A menudo la hembra suele inflar un poco su cuello, pero ella rara vez o nunca da vueltas en círculo. Las palomas hembras caminan lentamente y de forma seductora para llamar la atención de los machos, ellos en cambio, caminan rápidamente, sin pavonearse, moviendo la cabeza hacia arriba y abajo, a medida que hacen un círculo completo.

Para el apareamiento es muy común observar que la hembra sigue al macho alrededor del palomar en señal de invitación, o si el macho se encuentra quieto y reposando, ella hará una especie de caricia en la parte posterior de su cuello. Esto conduce a la etapa final del procedimiento de apareamiento conocido como ‘pisar’. Aquí la hembra se agacha, abre sus alas un poco y el macho salta sobre su espalda, después de lo cual, por medio de un ligero movimiento se lleva a cabo la copulación. Esta acción es muy rápida.

No es desconocido el hecho de emparejar aves del mismo sexo. Por ejemplo si dos hembras se emparejan ambas pondrán huevos, dos cada una, pero el resultado será cuatro huevos infértiles.